Trastornos de personalidad
La diversidad de la personalidad
La personalidad es un conjunto de características psicológicas que se expresan de forma automática en los diferentes ámbitos de una persona. Así, hay diversos tipos de personalidades y cada uno tiene un patrón psicológico diferente. Todos tenemos unos rasgos de personalidad u otros pero cuando se dan un conjunto de perturbaciones en esa estructura provocando una gran inestabilidad en la vida de una persona podemos hablar de rasgos desadaptativos o trastornos de personalidad.
Una persona con trastorno de personalidad tiende a tener un grado de mayor fragilidad ante situaciones de estrés e inflexibilidad para adaptarse a los cambios durante un tiempo prolongado a lo largo de su vida, limitando su equilibro emocional y generalizándolo a varias situaciones sociales e individuales.
A continuación, detallamos algunos patrones típicos de los diferentes trastornos de personalidad.
Trastorno límite de la personalidad
Relaciones sociales inestables, alteración en la identidad, impulsividad y vulnerabilidad de sufrir una conducta adictiva, ideas paranoides, inestabilidad afectiva y sensación de vacío.
Trastorno dependiente de la personalidad
Dificultad para tomar decisiones por sí mismo y asumir responsabilidades, necesidad de aprobación y miedo a perder el apoyo de los demás, sensación incómoda al cuidarse a sí mismo, preocupación excesiva por el abandono, dificultad para enfrentarse a situaciones de pérdidas y duelos.
Trastorno narcisista de la personalidad
Sentimientos de prepotencia y grandiosidad, necesidad de admiración por los demás, comportamiento arrogante, idealización de sí mismo, dificultad para sentir la empatía, uso de las relaciones sociales para obtener un fin propio.
Trastorno paranoide de la personalidad
Desconfianza en las personas con las que se relaciona, rencor persistente, miedo exagerado a ser dañado, malinterpretación de las señales del entorno, impulsividad ante el enfado o el contraataque.
Trastorno histriónico de la personalidad
Necesidad de ser el centro de atención, manipulación social mediante el mecanismo de seducción, teatralidad y expresión exagerada de sus emociones, cambios rápidos en sus emociones, sugestión y fácilmente influenciable.
Trastorno obsesivo de la personalidad
Preocupación excesiva por el detalle, la organización, las normas o el orden desatendiendo el objetivo principal de la tarea, perfeccionismo que impide la terminación de una actividad, dificultad para delegar e inflexibilidad ante ideas diferentes a las propias.
Trastorno fóbico de la personalidad
Miedo a la crítica, la desaprobación o el rechazo, evitación de situaciones a las que le cuesta enfrentarse, pensamientos autocríticos, esquivo en las relaciones sociales debido al sentimiento de vergüenza.
Trastorno esquizoide de la personalidad
Dificultad para desear relaciones íntimas y tener experiencias sexuales placenteras con la pareja, indiferencia ante la aprobación o desaprobación de los demás mostrando una afectividad plana en las relaciones sociales, preferencia por las actividades solitarias.
Trastorno esquizotípico de la personalidad
Delirios, creencias extrañas o pensamientos mágicos, ideas paranoides, demostración del afecto limitado o inapropiado, pensamientos y discurso desorganizado, ansiedad social excesiva, escasas relaciones sociales.
Trastorno antisocial de la personalidad
Incumplimiento de las normas sociales, mentiras repetidas, impulsividad, irritabilidad y agresividad, dificultad para asumir las consecuencias, desatención a la seguridad propia y de los demás.