Proceso evolutivo y cambio psicológico
En el momento de nacer, fuera del vientre materno, el ser humano comienza a percibir un entorno novedoso y pasa un tiempo antes de que todas esas vivencias se conviertan en experiencias que conllevan procesos de aprendizaje positivos o negativos.
La psicología evolutiva trata de marcar el proceso de cambio que se produce a lo largo de la vida del individuo, pasando por las diferentes épocas de su vida como niñez, adolescencia, juventud, madurez y vejez.
Aspectos psicológicos del cambio de una persona
En la niñez se interactúa con más aspectos novedosos ya que todo es un descubrimiento por primera vez. Ello hace que la curiosidad, el juego y los miedos impulsen a la mente del niño a organizar sus experiencias como agradables o desagradables formando así la concepción de lo que es el mundo.
En la pubertad se encuentran los cambios hormonales en los que el adolescente deja se ser un niño para poco a poco ser más adulto. El neurotransmisor que hace que las sensaciones sean más intensas y placenteras es la dopamina, provocando que desarrollemos funciones relacionadas con el placer. Así, mediante la conducta de exploración se produce una búsqueda repetida de estas sensaciones.
Siguiendo el proceso evolutivo hacia una responsabilidad y empatía más marcada que en la adolescencia, el cambio psicológico evoluciona hacia la juventud. Por ello, la persona está más dispuesta al compromiso en las tareas y relaciones, lo que nos lleva a un nuevo cambio en el aspecto psicológico de la personalidad del individuo.
La madurez conduce al asentamiento de los cambios realizados anteriormente para dar paso a la estabilidad junto a la rutina laboral y personal.
De este modo, la personalidad e identidad propia se encuentran más definidas que en etapas anteriores.
Tras el periodo de madurez llega la etapa de la vejez, dando lugar al deterioro cognitivo que forma parte del proceso y cambio de la persona, en el que la mente analiza la información más despacio respondiendo a los estímulos de forma diferente a otras etapas. Así, la persona se encuentra con toda una vida vivida y se rodea de entornos más tranquilos y seguros para llegar a lo que lo que es el final del proceso y cambio evolutivo en la psicología de la persona.